Y nos ha vuelto a pillar por sorpresa la cercana llegada de la primavera y su ausencia de lluvias. Y entre eso y la inminente celebración del Americana Film Fest (del que aquí daremos cuenta), hemos tenido entretenimiento suficiente durante los últimos días. Pero finalmente hemos sacado un hueco para otear las propuestas que están llegando este mes y, de entre un panorama notablemente variado, nos hemos quedado con un menú consecuentemente diverso. Que es el que sigue:
- Rimini y Sparta de Ulrich Seidl (estreno viernes 24): Es un poco tramposo hacer una recomendación doble allá donde suele haber una simple, pero lo mismo podría decirse de estrenar al mismo director por duplicado en un solo fin de semana. El cine del alemán Ulrich Seidl se nos ha ido escurriendo a lo largo de los años, pero sus historias y estilo incómodos hace tiempo que nos llaman la atención. El patetismo de un cantante venido a menos en la primera y la sombra de la pedofilia en la segunda parecen conformar una interesante puerta de entrada al mundo del realizador.
- John Wick 4 de Chad Stahelski (estreno viernes 24): El inesperado éxito de la saga de acción llega a su fin (suponemos) con esta nueva entrega. De ella esperamos set pieces de infarto y un poco más de ese mundo criminal que tiene algo de potteriano. Keanu Reeves está en la cresta de la ola con su papel de pistolero, el cine de tiros ha rejuvenecido dos décadas y nosotros estamos encantados de disfrutarlo en pantalla grande.
- To Leslie de Michael Morris (estrenada el viernes 3): Drama independiente que bien podría entrar dentro de la programación del Americana si no se le hubiera adelantado unos días, cuenta con la nominación a los Oscars más extrañamente polémica de los últimos años, la de la protagonista Andrea Riseborough. Lo que nos interesa a nosotros es que sus interpretaciones suelen ser muy sólidas (la última vez que la vimos fue en Possessor) y que de vez en cuando nos gusta disfrutrar un relato de esos de América profunda.