[Atención: contiene spoilers]
Veo con retraso La LEGO película, la última gran revelación del cine de animación, dirigida en 2014 por Phillip Lord, Christopher Miller y Chris McKay. Y, al acabar, no puedo evitar sentir una extraña e inconcreta desazón. Técnica y estéticamente la película es despampanante. Está estupendamente dirigida. Es irremediablemente disfrutable. Pero hay una vocecita interior que me indica que hemos cruzado una invisible y delicada línea. Por mucho que trate de quitarle hierro al asunto, me hace sentir incómodo el hecho de que los 100 minutos de La LEGO película sean un impresionante anuncio.