La mañana del 18 de octubre, en pleno Festival de Sitges 2013, Takashi Miike protagonizaba una de las master class que organiza el certamen, y que suelen enfocarse como un encuentro con los fans, tomando la forma de una ronda de preguntas y respuestas con el invitado de turno.
Para el que no lo conozca, Takashi Miike es un director japonés nacido en Yao (prefectura de Osaka) el 25 de agosto de 1960. Caracterizado por un ritmo de trabajo tremendamente prolífico (apenas hay año en que dirija menos de dos o tres películas), se dio a conocer en nuestro país gracias a la peculiar cinta de terror «Audition» (1999) y, un par de años después, con «Ichi the killer», consolidaba una importante base de fanáticos, que lo aupaban como referente del cine de autor más extremo. Automáticamente, se ha convertido en un habitual de Sitges, donde se suelen dar cita todos sus estrenos. Sigue leyendo