Cuesta imaginar una película como «De Nicolas a Sarkozy» en España. Tal vez sea cosa de la juventud de la democracia patria, o simplemente falta de atrevimiento, pero el caso es que resulta extraña la idea de toparse en la cartelera con un «De Zapatero a ZP», por ponerle nombre. Incluso cuando se ataca la temática desde otros países vecinos como el Reino Unido, se hace manteniendo algo más de distancia en el tiempo («La dama de hierro», Phyllida Lloyd, 2011) y, sin duda, con mayor amabilidad («The Queen», Stephen Frears, 2006). Es por ello que el film que nos ocupa resulta de interés y hasta cierto punto valiente.
Y es que «De Nicolas a Sarkozy» se manifiesta con fuerza al plantear la política como un espectáculo televisivo-circense -algo que ya se apunta desde los mismos títulos de crédito y que se desarrolla con precisión a través de la música-, en el cual la ambición y el ansia de poder caminan, como mínimo, en paralelo a la voluntad de entrega a la nación.
El retrato global funciona gracias a un impecable elenco de actores, entre los que destaca Denis Podalydès que, sin tener un parecido clónico con el presidente que representa (algo que sí ocurre en casos como el de Jacques Chirac), transmite un sentido del patetismo que debería ser objeto de análisis por las partes aludidas.
Aún así, como en una campaña electoral, la cinta adolece de cierto desgaste, tal vez debido a la densidad política que desarrolla, y a pesar de contar con una puesta en escena donde brillan ciertos momentos, más allá de la sobriedad que suelen manejar este tipo de relatos. Es lo que hace que la presidenciable a gran película se quede en secretaria del Estado de la Cartelera.
Pero sin duda, «De Nicolas a Sarkozy» forma una pequeña parte de la necesaria radiografía global que debería ayudarnos (a Francia, a Europa, a la cultura occidental en general) en el camino de la autorreflexión para redirigir una sociedad vulnerable, que busca entre bandazos -y a veces sin tan siquiera saberlo- un cambio, pero aún no ha encontrado la concreción que lo represente.